4 y 20 minutos (AM).
Muy tarde...
Abro mis ojos porque un estruendoso ruido averió mis sueños. . Pienso solo en buscar la forma de apaciguar ese exasperante sonido que aturde mi cómoda somnolencia; recapacito... -Ya no hay eclipse, mis grandes ojos adormecidos por fin reaccionan y buscan con presteza la ventana que da frente a mi piltra, mi mente no duda en captar la necesidad que mi cuerpo siente al querer dirigirse a aquella cristalera que da luz nocturna a esta oscura habitación, tan pronto me veo ahí, de reojo observo por encima de la persiana y quedo inerte hacia la primer luz roja descolorizada y redonda que veo, intento reaccionar de manera apresurada para descubrir por completo el ventanal y curiosear lo que anhelaba contemplar, pero... lo único que ví fue una bombilla de luz amarilla que estropeo mi ilusión, no obstante, examiné con quietud el cielo y la ví, hermosa como siempre, más no como ansiaba verla; así que mi desencanto me hizo dar vuelta y regresar nuevamente a mi cama, dando pasos torpes para reposar 10 minutos más. Cerré mis ojos...
...Me veo locamente emocionada en la sala de mi casa, observando por la ventana precipitadamente, esperando ver la Luna Sangre, pero el cielo nubloso me lo impedía, Así que no siendo más, salí de mi vivienda a buscar en la esquina de un hogar, espacios en el cielo que me permitan ver el eclipse. Mientras caminaba me despistaba de manera constante atisbando el "paraíso", hasta que al fin la pude ver, roja y grande; curiosamente se movía a gran velocidad de un lado a otro, lo cuál se me hizo extraño, pero mi mirada no dejaba de perseguirla dichosa, poco a poco el cielo se fue despejando y de la nada inicio una espléndida lluvia de estrellas, <llovían, literalmente>; caían brillantes, reboteaban y se convertían en hermosas piedras livianas, pedí cualquier cantidad de deseos; en seguida proseguí a caminar y en el centro del cielo que yo observaba, se veían las fases de la luna completas y tan rojas que mis ojos brillaban con amor y sonreía con sosiego...
Abrí mis ojos y me encuentro aquí, placentera de tan preciado sueño que me hizo sonreír.
Miré el reloj que me despertó y marcaban las 4:40am.
Luna Sangre 08/Oct/2014 REUTERS Fotografía enviada desde Ecinitas, California. Tomada desde ElTiempo.com
KellentCoronado
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